Dubái-Atractivos

DUBÁI

Dubái, la ciudad del mundo que más ha crecido en la última década, un destino turístico de lujo cada día más solicitado por viajeros de todo el mundo. Podrás descubrir todos los secretos de esta ciudad que ha comenzado a darse a conocer a finales del siglo XX.

Burj Khalifa:

 El Burj Khalifa (Torre Califa) es el edificio más alto del mundo con una altura de 828 metros. En la construcción del edificio han participado más de 12.000 personas de 30 países. Anteriormente fue conocido como Burj Dubai (Torre de Dubái).  Cuenta con 163 plantas. Debe su nombre al Jeque y presidente de los Emiratos Árabes Unidos, Jalifa bin Zayed Al Nahayan.

La construcción del Burj Khalifa comenzó el 21 de septiembre de 2004 y finalizó el 4 de enero de 2010, más de un año después de lo previsto. El rascacielos destaca por tener un gran número de plantas residenciales.

Burj Khalifa cuenta con dos miradores que ofrecen vistas sorpredentes. En la planta 124, localizado a 442 metros de altura, encontraréis el que hasta ahora era el único mirador de la Torre Califa, sin duda alguna el mejor punto de Dubái para contemplar la ciudad.

El segundo de los miradores, de reciente inauguración, acapara todas las miradas tras haberse convertido en el más alto del mundo arrebatando este título al de la Torre Canton en Guangzhou. Localizado a 555 metros de altura, el mirador ocupa la planta 148 del edificio para ofrecer unas sorprendentes vistas de pájaro de la ciudad en miniatura, como no podría ser de otro modo desde semejante altura.

Fuente de Dubai: 

La Fuente de Dubái mide 275 metros de longitud (un 25% más que las Fuentes del Bellagio) y cuenta con 6.600 focos y 50 video proyectores para iluminar el agua. Sus impulsores son capaces de lanzar el agua a más de 150 metros de altura

Burj Al Arab

: El hotel Burj Al Arab está considerado el único hotel de 7 estrellas del mundo. Desde su construcción ha sido catalogado como el mejor hotel del planeta por muchos expertos hoteleros. está construido en su propia isla artificial a 280 metros de la costa, mide 321 metros de altura, todas sus habitaciones son suites (la más pequeña de 175 metros cuadrados) y el servicio de transferencia del hotel se compone de BMWs, Rolls Royce y un helicóptero privado. Su construcción duró cinco años y el hotel se inauguró en diciembre de 1999. Actualmente su estructura con forma de vela hace que sea uno de los edificios más fotografiados del mundo. Las tarifas comienzan a partir de 1.300€ ($26.883,38) por noche , incluyendo desayuno, dátiles, bombones e incluso un juego completo de productos Hermes para hombre y mujer.

Palmera Jumeirah

Localizada en la costa de Dubái, la Palmera Jumeirah es uno de los atractivos más conocidos de Dubái. Está formada por un conjunto de islas artificiales con forma de palmera compuesta por un tronco, 17 ramas y un semicírculo que actúa como rompeolas.

La construcción de la palmera comenzó en el año 2001 y fue finalizada en el 2008. Para la construcción se utilizaron arena y rocas suficientes como para formar un muro de seis metros de altura capaz de dar tres vueltas a la tierra, algo que le proporciona una superficie total de 31 kilómetros cuadrados.

The Palm Jumeirah forma parte de un ambicioso proyecto que pretendía la construcción de otras dos palmeras: Palm Jebel Ali y Palm Deira, las cuales no se encuentran finalizadas.

Además de un importante reclamo turístico, The Palm Jumeirah es una zona residencial repleta de hoteles entre los que destaca el llamativo Hotel Atlantis, un lujoso establecimiento que cuenta con el parque acuático más grande de Oriente Medio, Aquaventure Water Park. El  Palm Jumeirah es una de las obras maestras de Dubái siendo imprescindible disfrutarla desde las alturas. La mejor forma de contemplarla es dando un paseo en helicóptero o en hidroavión pueden optar por saltar en paracaídas para disfrutar de las impresionantes vistas.

Al Bastakiya:

Bastakiya es una de las zonas más antiguas de Dubái, un espacio detenido en el tiempo en el que aún se puede disfrutar de la atmósfera tradicional emiratí como si se tratara de principios del siglo XIX. Bastakiya comprende un área de antiguas casas con sombreados patios interiores que han sido reformadas para mostrar el esplendor de tiempos pasados.

Sobre las estrechas calles del barrio se alzan los antiguos captadores de viento, un curioso sistema que canalizaba el aire hacia las casas para refrescarlas.

Las que un día fueron ostentosas viviendas de ricos mercaderes, actualmente son tiendas, galerías de arte y acogedores cafés que completan el agradable espacio del barrio, haciendo que sea un auténtico placer perderse por sus tranquilas calles.